¿Te has decidido a vestir tu hogar con una o varias alfombras?

Las alfombras son el elemento decorativo en el hogar más polivalente: decoran las estancias, aportan calidez, aislan del frío, nos ayudan a delimitar espacios y nos ayudan con las alergias a los ácaros.

Para ayudarte en la elección te damos una serie de consejos para que elijas la alfombra perfecta y no te equivoques, ya que de ello depende que una habitación quede espectacular o al contrario no quede como deseabas. Y es que con tantísima variedad que existe para elegir, con tantos acabados, colores y estampados, no es nada fácil elegir aquellas que se adapten más a nuestra vivienda y forma de vida.

¿Qué debes tener en cuenta antes de elegir una alfombra?

  • Lo primero que tienes que tener muy claro es que utilidad le vas a dar, es decir, si las quieres para que te aíslen del frío, para que te ayuden a decorar una habitación, para dar un toque elegante al distribuidor…
  • ¿Dónde la vas a situar?. No es lo mismo hacerlo en un cuarto de juegos o en una habitación con poco tránsito. Si la quieres para tu dormitorio elegirás una alfombra que sea suave y transmita calidez cuando andes sobre ella, y si la eliges de colores claros no te equivocarás. Por el contrario si deseas colocar una alfombra en un lugar donde va a sufrir muchas pisadas deberás comprar una alfombra muy resistente y de pelo corto, porque si eliges una para estos lugares de sisal o fibras naturales ten presente que se desgastarán por aquellas zonas donde más se pisen. Si aún con esta advertencia, prefieres una alfombra de sisal para ello, elígela muy plana, con el menor relieve posible, de esa manera aguantará bastante más. Y recuerda que para una zona de paso, una alfombra de color muy claro no será una buena opción.
  • ¿Quién va a disfrutar de la alfombra? Si en tu casa hay niños o mascotas será una buena idea que elijas alfombras de colores oscuros, esconden mejor las manchas. Si por el contrario vives con alguna persona mayor, ten cuidado con el grosor de la alfombra que elijas ya que se podría tropezar.
  • ¿Cúal es la decoración de tu vivienda? Si tienes una decoración clásica puedes elegir una alfombra estampada. Sin embargo, si te gusta la decoración minimalista cuanto menos colores mejor.
  • Deberás tener muy en cuenta siempre el tamaño de la alfombra porque tiene que ser lo bastante grande para que encaje encajar en el lugar donde la quieras situar. Lo ideal es que tenga el tamaño para que los muebles queden sobre ella. Si la estancia es rectangular, elige siempre una alfombra rectangular, y si fuera cuadrada, lo mismo, la alfombra debería ser cuadrada.
  • Ten cuidado con los espacios dónde las quieras poner, porque por ejemplo si la quieres para un recibidor o cerca de una puerta, si no lo mides bien es más que probable que al abrir las puertas se te arruguen y descoloquen, estando continuamente colocándolas de nuevo.
  • Los estampados o colores te ayudarán a elegir el efecto y sensación que buscas. Pero antes de elegirla debes tener en cuenta los colores que ya en la habitación y los colores o estampados de sofás y cortinas.

Elige colores claros si buscas que den sensación de relax y si buscas que la habitación parezca más grande. Si deseas crear un espacio cálido y acogedor, puedes elegir alfombras de colores oscuros o colores vivos.

Si, por ejemplo, tu sillón está tapizado de una tela de un solo color, para contrarrestar puedes colocar una alfombra estampada que lleve los colores del sofá. Si por el contrario, la habitación ya dispone de estampados y su decoración tiene varios colores, la mejor opción es que elijas alfombras de un solo color que combine con el resto de la decoración.

No debes olvidar nunca tener en cuenta el tipo de muebles, los colores del suelo y las tapicerías y telas que ya existan en la estancia.

  • Los componentes de tu alfombra es otro factor a tener muy en cuenta. Un sillón estilo vintage va perfectamente con una alfombra de pelo largo, y si dispones de un sofá de piel o cuero si lo acompañas de alfombras de sisal harás de la estancia algo aburrido. Si buscas romper un poco con una decoración excesivamente clásica, una buena opción es vestir el suelo con una alfombra de sisal, que quedan estupendamente en todo tipo de estilos decorativos.
  • No vayas a la búsqueda sólo de lo barato, recuerda que a la larga lo barato sale muy caro. Siempre es preferible gastarte un poquito más y con ello lograrás que las alfombras te duren más aparte de que su pisada será mucho más agradable.

Y si deseas mantener tus alfombras siempre en buen estado, no dejes de leer nuestro artículo “Cómo cuidar las alfombras”.