Si en Navidad pones un árbol de Navidad artificial, a no ser que sea nuevo, es seguro que lleva un año guardado en trasteros donde acumula polvo. Por ello, es conveniente, cada año, realizar una buena limpieza. De esa manera evitaremos alergias.

Lo primero que tenemos que hacer es montar el árbol. Una vez montado hay que pasar la aspiradora con la boquilla para tapicería y la velocidad mínima. Empezar por las ramas superiores y continuar hacia abajo, siempre en círculos. Después de este paso, para que la limpieza sea completa, lo ideal es continuar limpiando con agua y jabón. En un cubo de agua grande hecha una parte de detergente suave. Humedece un paño y lava suavemente cada rama, de arriba a abajo y en movimientos circulares.

Cuando termines la limpieza, deja que el árbol se seque al aire o en un lugar ventilado hasta que la humedad haya desaparecido por completo.